El Jardín de San Francisco

El Jardín de San Francisco

miércoles, 28 de febrero de 2018


Resultado de imagen de cuaresmaPadre, al amanecer este nuevo día, haz que seamos fieles a tus enseñanzas y líbranos del error y del pecado en este día.
Concédenos la gracia de caminar en tu luz, y ver tu luz en todas las personas que encontremos en nuestro camino.
PADRENUESTRO.
QUÉ ES CUARESMA:
Se conoce como Cuaresma al período del tiempo litúrgico, los cuarenta días anteriores a la celebración principal del cristianismo: la Resurrección de Jesucristo, que se celebra el Domingo de Pascua. La Cuaresma es una palabra de origen latín “quadragésima”, que significa “cuadragésimo día” (antes de la Pascua). La Cuaresma es practicada desde el siglo IV y  comienza el Miércoles de Ceniza y termina el Jueves Santo, cuando los católicos, los católicos ortodoxos, los anglicanos y algunas iglesias evangélicas se preparan para la Pascua.
                      ORACIÓN
No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.

Tú me mueves, Señor; muéveme el verte
clavado en la Cruz y escarnecido.
Muéveme ver tu cuerpo tan herido
muévenme tus afrentas y tu muerte.

Muéveme, en fin, tu amor, de tal manera,
que aunque no hubiera cielo, yo te amara,
y aunque no hubiera infierno, te temiera.

No me tienes que dar porque te quiera;
pues aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.
(Soneto atribuido a San Francisco Javier)
EVANGELIO DEL DÍA
Lectura del santo evangelio según san Mateo 20,17-28
En aquel tiempo, mientras iba subiendo Jesús a Jerusalén, tomando aparte a los Doce, les dijo por el camino: «Mirad, estamos subiendo a Jerusalén, y el Hijo del hombre va a ser entregado a los sumos sacerdotes y a los escribas, y lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles, para que se burlen de él, lo azoten y lo crucifiquen; y al tercer día resucitará.»
Entonces se le acercó la madre de los Zebedeos con sus hijos y se postró para hacerle una petición.
Él le preguntó: «¿Qué deseas?»
Ella contestó: «Ordena que estos dos hijos míos se sienten en tu reino, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda.»
Pero Jesús replicó: «No sabéis lo que pedís. ¿Sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber?»
Contestaron: «Lo somos.»
Él les dijo: «Mi cáliz lo beberéis; pero el puesto a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo, es para aquellos para quienes lo tiene reservado mi Padre.»
Los otros diez, que lo habían oído, se indignaron contra los dos hermanos. Pero Jesús, reuniéndolos, les dijo: «Sabéis que los jefes de los pueblos los tiranizan y que los grandes los oprimen. No será así entre vosotros: el que quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor, y el que quiera ser primero entre vosotros, que sea vuestro esclavo. Igual que el Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por muchos.»
LA DOBLE MEDIDA
Señor, disculpa mis flaquezas,
mis caídas y silencios.
Dame otra oportunidad.
Olvida mis negaciones,
mi tibieza, mis eternas contradicciones.
Ábreme otra vez la puerta,
acógeme en tu casa y en tu abrazo.
Tú, que sabes cómo soy.

Perdona tú, hijo,
a quien te hirió con sus flaquezas, sus caídas y silencios…
a quien no estuvo a la altura, a quien no supo quererte bien…

Pero ¿por qué?
¿para que me vuelva a herir,
me falle de nuevo, o me deje en la estacada?
¿Cómo olvidar la decepción, las medianías,
las perpetuas frustraciones?
¿Por qué mantener la puerta abierta,
mi casa dispuesta y el brazo tendido?

He ahí el dilema, constante y humano.
La doble medida. La piedad suplicada para uno mismo
y negada al otro. El amor acogido con gratitud,
pero entregado con cuentagotas.
La claridad ante la necesidad propia,
que se vuelve ceguera ante lo ajeno.
Aprended de mí, que soy Dios de misericordia.


miércoles, 21 de febrero de 2018


La Cuaresma es presentada como un tiempo de gracia (tiempo de misericordia), que Dios nos ofrece para conseguir la purificación interior del espíritu. Vernos libres del pecado, de nuestros vicios y esclavitudes, reordenando adecuadamente nuestras potencias y pasiones, aprendiendo a usar los bienes materiales como medios y no como fines, comprendiendo su naturaleza perecedera y por tanto no apegándonos a ellos desordenadamente. Este es el sentido de la penitencia cuaresmal: cambio de mentalidad, despojarse del hombre viejo para revestirse del hombre nuevo.
Que en la semana de este primer domingo de Cuaresma, podamos reflexionar teniendo en cuenta a las personas que nos rodean: familiares, compañeros de trabajo, de estudios, vecinas, vecinos, etc., si alguno de ellos o ellas están atravesando situaciones de dolor, pérdida o duelo, y si hemos sido indiferentes o no a ese dolor.

Señor y Padre nuestro, queremos confesarte que no siempre actuamos como sabemos que deberíamos hacerlo. Te pedimos que nos ayudes a cambiar para que el dolor no nos sea indiferente. Danos la fuerza para hacerlo y la fe para creer en tu Evangelio.

Dios y Señor nuestro, acudimos a ti, pidiéndote que nos conviertas a ti, de todo corazón. Haznos pacientes con los que yerran el camino; haznos delicados con los que nadie respeta; haznos sencillos con los que son maltratados; haznos humildes con los que no tienen fuerzas

Señor, enséñanos a orar, pues nos cansamos enseguida de estar contigo; sin embargo, sabemos que al orar somos más entrega, tenemos más fuerzas, amamos más todos. Haz, Señor, que seamos orantes a corazón abierto, a pie descalzo, con entrega incondicional.

Hoy, Señor, quiero convertirme. Sé que con mis fuerzas no puedo, pero lo quiero, deseo ardientemente cambiar de rumbo. Ir por el camino del amor y el compromiso, en favor siempre de los desheredados de este mundo.

Sabemos, Señor, que tú caminas a nuestro lado y eres cercano cuando la luz se apaga. Rezamos por todos y cada uno de los hombres de nuestro planeta. Haz una tierra nueva llena de amor y paz donde tú seas siempre encontrado en los caminos. Te buscamos Señor, te llamamos siempre, acude en nuestra pobreza

Sabemos, Señor, que nuestra civilización está herida de muerte, porque se potencian muchas cosas que van contra la vida. No nos dejes solos y tristemente desanimados. Ayúdanos a ser constructores de vida, de una nueva civilización desde el amor a la vida en la nueva ley.

Nos dijiste, Señor, que amásemos todos, a los que nos aborrecen. Tu amor es exigencia total, es un amor que hace bien; amas a fondo perdido todos los enemigos. Gracias por tu ejemplo, por tu amor sin fingimiento, porque eres bueno nos quieres llenar de tu bondad.


miércoles, 7 de febrero de 2018

La oración no es un entretenimiento ocioso para alguna anciana.


Resultado de imagen de velaLa oración entendida y aplicada adecuadamente, es el instrumento más potente para la acción. (MAHATMA GANDHI).
Santa María, Tú que enseñaste a Jesús a rezar, ayúdanos a comprender el valor de la oración para poder encontrar al Señor en nuestras vidas y descubrir qué es lo que quiere para cada uno de nosotros.
PADRENUESTRO
PADRE NUESTRO que en ti creemos, confiamos, pensamos y adoramos.
QUE ESTÁS EN EL CIELO y en el último rincón de nuestra vida,
ayudando y enseñando a los demás, admirando lo que hacemos día tras día, apoyándonos en todo momento.
SANTIFICADO SEA TU NOMBRE por todo hombre, sea rico o pobre, para que sepamos valorar y cumplir tu palabra.
VENGA A NOSOTROS TU REINO que está aquí, entre nosotros, un reino soñado lleno de felicidad y amor, que debemos ir haciendo realidad día a día.
HÁGASE TU VOLUNTAD, COMO EN EL CIELO, TAMBIÉN EN LA TIERRA para que la tierra sea paz y bien, para que el amor esté siempre presente en nosotros.
EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA DÁNOSLE HOY, a todos por igual, ricos y pobres, sin diferencias.
Y PERDÓNANOS NUESTRAS DEUDAS, perdónanos porque somos egoístas, porque nos dejamos llevar por las malas influencias y por alejarnos de ti aunque interiormente no queramos; por toda tu bondad, que te caracteriza, perdónanos.
ASÍ COMO NOSOTROS PERDONAMOS A NUESTROS DEUDORES, aunque sea a regañadientes, haz Señor que lo hagamos de corazón y que así lleguemos a ser como tú quieres.
Y NO NOS DEJES CAER EN LA TENTACIÓN del egoísmo, de los celos, la soberbia, la gula, la locura, el pasotismo y la incultura.
MÁS LÍBRANOS DEL MAL que hemos pasado, que hemos sufrido, contra el cual hemos luchado, que recibiremos y haremos en un futuro próximo, hasta llegar a la Gloria.
AMÉN. Aquél que nos hace cómplices, hermanos, amigos, en el día a día, en el cansancio, en la alegría, en la tristeza y en la esperanza.
Amén para que siempre sea tu Palabra nuestra última palabra.

Lectura bíblica: Mc 12,28b-34
Un escriba que los oyó discutir, al ver que les había respondido bien, se acercó y le preguntó: “¿Cuál es el primero de los mandamientos?”. Jesús respondió: “El primero es: Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor; y tú amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, con todo tu espíritu y con todas tus fuerzas. El segundo es: Amarás a tu prójimo como a tí mismo. No hay otro mandamiento más grande que estos”. El escriba le dijo: “Muy bien, Maestro, tienes razón al decir que hay un solo Dios y no hay otro más que él, y que amarlo con todo el corazón, con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a sí mismo, vale más que todos los holocaustos y todos los sacrificios”. Jesús, al ver que había respondido tan acertadamente, le dijo: “Tú no estás lejos del Reino de Dios”. Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas.
Breve meditación personal.
Haz silencio en tu interior y pregúntate:
1.- ¿Qué me dice el evangelio que he leído?
2.- ¿Cómo ilumina mi vida?
3.- ¿Qué tengo que cambiar para ser más como Él?
4.- ¿Qué me falta para ser más como Él?

LA VIDA ES

La vida es una oportunidad, aprovéchala.
La vida es belleza, admírala.
La vida es felicidad, siéntela.
La vida es un sueño, hazlo realidad.
La vida es un reto, acéptalo.
La vida es un deber, cúmplelo.
La vida es un juego, participa en él.
La vida es valiosa, saboréala.
La vida es riqueza, consérvala.
La vida es amor, disfrútalo.
La vida es misterio, desentráñalo
La vida es una promesa, cúmplela.
La vida es tristeza, supérala.
La vida es una canción, cántala.
La vida es lucha, acéptala.
La vida es tragedia, arróstrala.
La vida es aventura, atrévete.
La vida es vida, consérvala.
La vida es suerte búscala.
La vida es demasiado preciosa, no la destruyas”.
Santa Teresa de Calcuta
QUE TU LUZ ALUMBRE A    LOS DE LA CASA
Hoy os propongo escuchar con atención un breve texto del evangelio.
Jesús decía a sus discípulos:
“¿Acaso se trae una lámpara para taparla con una vasija de barro o ponerla debajo de la cama? ¿No es para ponerla encima de una mesa o de un candelero y que alumbre a toda la casa”.
Como dice Jesús… nadie enciende una vela para esconderla, sino para que dé luz. Ciertamente que parece evidente esto que hemos escuchado. Pues mirad.
Todos nosotros podemos ser luz para todos los que nos rodean, pero en lugar de “ABRIRNOS” y dar nuestra luz, nos escondemos y no dejamos que la luz que llevamos dentro salga para alumbrar a los demás.
Quizá por miedo a SER AUTÉNTICOS, a ser gente que se preocupa por los demás, por miedo a ser compañeros atentos, cercanos a todos, o por miedo a “ser diferente”, escondemos esa luz que llevamos dentro y que puede hacer tanto bien a los demás.
Nadie se compra un móvil para no usarlo; nadie compra una lavadora para luego lavar a mano, nadie compra un coche para dejarlo en el garaje... Por eso, acércate a los demás, comparte tus cualidades con los que te rodean, sonríe, bromea, haz que la gente sea más feliz y consigue así que tu vida sea luz para los que te conocen, y no oscuridad.